Uno de los puntos más negativos de la gestión del Gobierno de Aragón(y mira que es difícil elegir entre tantas posibilidades), es sin duda cómo ha abordado a lo largo de estos años la rehabilitación del Teatro Fleta. En la página de Apudepa se puede firmar el siguiente manifiesto, exigiendo que se culmine su rehabilitación.
Conciudadano: El Teatro Fleta en Zaragoza es uno de los edificios modernos más importantes de Aragón y de España y como tal se encuentra registrado por la Fundación Internacional DOCOMOMO Ibérico y protegido por la ley de patrimonio y la normativa urbanística vigentes.
Tras gastar miles de millones de pesetas un su supuesta “rehabilitación”, la Diputación General de Aragón quiere hacernos creer que el Fleta ya no existe para poder derribarlo y así venderlo a la SGAE. Pero no es cierto: El Teatro Fleta no está en ruinas, está en obras.
Su rehabilitación ha sido detenida por el Gobierno de Aragón en el momento más crítico del proceso para poder justificar el derribo del Teatro. Se han perdido para siempre, lamentablemente, la caja escénica y otros elementos del edificio. Pero no por ello debemos perderlo todo. Si las obras continúan, el Fleta podrá recuperar la magia de su maravillosa sala, la fuerza arquitectónica de sus espacios secundarios, la prodigiosa estructura de su anfiteatro…
Salvar el Fleta es posible. Solo los ciudadanos podemos lograrlo: Zaragoza, el cinema y el patrimonio cultural te necesitan.
Lo del Fleta es de traca. De todo esto me surgen dos dudas: primero, si lo veremos terminado alguna vez, y segundo, si el proyecto no terminará convirtiéndose, a fuerza de obstáculos, en un nuevo centro comercial para la zona, en lugar de una infraestructura cultural imprescindible para la ciudad.
Un abrazo.
El Fleta es la mejor expresión del desastre que ha sido la política cultural del Gobierno de Aragón desde 1999 en que se formó la coalición PSOE-PAR.
Muchas gracias, Valentín, por hacerte eco de la recogida de firmas, y por contribuir con tu esfuerzo a esta petición tan justa y tan necesaria. ¡A ver si entre todos los ciudadanos podemos lograrlo! Un abrazo desde APUDEPA.
Estamos de acuerdo plenamente con Adrián. La política cultural del PARSOE es un auténtico desastre, si es que existe. Y el Fleta es la mejor prueba de ello.
Es una autentica vergüenza. Precisamente esta mañana me he encontrado con uno de los responsables de esta barbaridad. Y oye, el tío tan campante, como si nada.
A mí me saca de quicio tanta dejadez y oscurantismo, porque esto ya es de ser imbécil pero con mayúsculas.
Saben de cultura lo que yo de hacer ganchillo. Pero no tiene disculpa que el resto del personal no exijamos con más fuerza la recuperación de ese espacio tan importante en la historia de la ciudad.
Besos acalorados, Valentín
desde mi ignorancia me gustaría hacer dos preguntas,
1º) ¿como o con qué criterios se puede hacer una rehabilitación, derribando aquello que se quiere rehabilitar para hacer algo distinto?
2º) ¿es cierto tal como se dijo, que la estructura de la platea no resistía las cargas exigidas hoy en día?
salud,
Desde el Blog de APUDEPA:
Estimado aguardentero. Quizás desde APUDEPA podamos ayudar a resolver algunas dudas respecto de sus preguntas. Nosotros consideramos que el proyecto de rehabilitación que se aprobó en su día (y que tanto entusiasmó a gobernantes, políticos y medios de comunicación) no era bueno porque eliminaba, efectivamente, parte de los elementos de interés del edificio. APUDEPA lo denunció en 2000 ante el Ayuntamiento y públicamente en 2002. Nadie nos hizo caso. En toda rehabilitación se da un proceso de eliminación, de sustitución y de adición. El proyecto no era bueno. Pero no tanto la solución arquitectónica como el encargo político. No cabía un teatro de la Ópera. Pero ya no hay marcha atrás. Se ha consumado la primera fase y ahora no vale derribar lo que sí se conserva. No hay más solución que seguir adelante, restituir lo que el proyecto contempla restituir y cumplir la catalogación del edificio. Decir que era una rehabilitación extremadamente respetuosa con el patrimonio era mentir. Pero decir que no queda nada y que es irrecuperable es mentir más todavía. El teatro Fleta no está en ruinas. Está en obras. Y esto hay que repetirlo cuantas veces sea necesario porque nos lo quieren hacer olvidar. El Gobierno ha invertido en el edificio más de 2000 millones de pesetas. Y el gasto se dilapidaría si no prosiguieran los trabajos. En cuanto a la segunda pregunta, es obvio que las sobrecargas fijadas actualmente por la normativa de edificación no son soportadas con un margen de seguridad razonable por los edificios existentes. Pero no sólo el Fleta. El Pilar incumple escandalosamente la normativa. Y la catedral de Burgos y la Alhambra. Por ello el patrimonio merece un tratamiento individualizado y sesudo, dando a cada edificio lo que pueda soportar. No se trata de adaptar el patrimonio a nuestros caprichos sino de adaptar nuestros caprichos al patrimonio. Esperamos haber sido de alguna utilidad. Un saludo desde el Blog de APUDEPA.
Valentín, te dejo un correo, cuando puedas me contestas.
Un beso,