CANCIÓN DE LA TIERRA PERDIDA, POR VALENTIN CAZAÑA

Hace tiempo quería escribir una canción sobre la tierra perdida.

Sobre la tierra que quiso gritar y fue olvidada.

Sobre los pueblos en los que ahora viven lucios.

Sobre las palabras arrojadas al limbo de la desidia.


Sobre los ríos salvajes que fueron capturados.

Sobre las mujeres y hombres que se fueron llorando recuerdos.

Sobre los políticos que santificaron el expolio.

Sobre las montañas heridas por el dinero insaciable.

Sobre la carrasca solitaria junto a la que alguien juró volver

y luchar por conseguir rescatar la memoria de la tierra.

Anuncio publicitario

RESPONDIENDO A FACEBOOK

Pienso sueños
pienso parolas
pienso luego existo
pienso seguir luchando
pienso reir lo que me dejen
pienso mirar la luna y ver tu cara
pienso follar lo que pueda
pienso gritar y no cerrar los ojos
pienso evitar que me alienen
pienso correr detrás de las ilusiones
pienso no subir nunca en el barquito de Belloch
pienso que Ice-T tendría que haber venido a Zaragoza hace 15 años
pienso que solo la insumisión nos hace libres
pienso que el bocata vegetal del Gallizo es el mejor que he probado
pienso que bel diya a chen d´ista nazión charrará y beyerá os suyos dreitos linguisticos reconoxitos
pienso dejar que el corazón se me acelere al escuchar «Nazio ibiltaria naiz»
pienso que tengo que terminar esto antes de que penséis que se me ha ido la olla

UNA SALIDA INESPERADA

Yo sé que a veces las palabras nos emboscan,
travestidas de sonidos agradables.
Resulta difícil resistir la tentación
de caer rendido ante la alienación de las ideas.
No son cantos de sirena precisamente
lo que nos trata de arrastrar al limbo,
sino la voz de un bardo sin imaginación.
Cuando lo creía todo perdido,
miré hacia adelante y descubrí una salida.

LA NOCHE DE LA HERIDA, POR VALENTÍN CAZAÑA

Recupero un poema de 2001 ante la sequía creativa de los últimos días.

Ayer por la noche, el sabor de los porros
me regaló el calmante para tu herida.
El derrame de imágenes que me atacaba
desapareció ya fuera del Crápula.
Las sombras bailaban burlonas a mi alrededor,
y yo necesitaba vomitar sentimientos,
escupir sobre mi rastro
.

PROMETO NO ESCUCHAR, POR VALENTÍN CAZAÑA

Pido perdón por escuchar las necias palabras de los dinosaurios.
Prometo no volver a manchar mis timpanos con su sonido mortecino.
Cuentan que si les escuchas te ves arrastrado
a su mundo de miseria y de pobreza mental.
Me taparé los oidos al recorrer sus caminos plenos de alacranes ponzoñosos,
evitando padecer sus voces indignas de odio.

Prefiero escuchar las risas libres de la madrugada,
desviar mi atención hacia el mundo real
donde los hombres y las mujeres no son instrumentos
donde rebote el eco de los corazones vacíos.

DESCONCIERTO, POR VALENTÍN CAZAÑA

¿Por qué la satisfacción nos fue negada?
Nos escondimos tras nuestros escudos,
temerosos ante una victoria no deseada.
No comprendimos los guiños de la realidad
que nos salieron al paso.
Si nuestros cuerpos pueden mentir,
arrojaremos al vacío los ríos de Jade?

UN DÍA DIBUJÉ UN VERSO, POR VALENTÍN CAZAÑA

La voz escondida aparece de nuevo. Ha costado mucho y los sonidos todavía se juntan con dificultad. 

Un día dibujé un verso

y con él pretendí engañar al tiempo.

Me serví de las palabras inventadas

para recuperar heridas del pasado,

no tanto por engañarme sino por escapar.

Recorrí el mundo con esas silabas falsas,

y al final del viaje descubrí

que en realidad yo mismo era la invención.

SUENIOS ENTRE LINZUELOS, POR VALENTIN CAZAÑA

Güe, me fa goyo remerar bellos poemas, que son biellos e tamién nuebos. Ta leyer-ne más en charrando.com.

UN

Besitando a tuya bayía de chelo,
encletata por o xalapón
de os míos suenios .

Fuyindo de os cantos
de os tuyos güellos
que m´enristen con ondas
de remeranzas amagatas .

Escruxinando segundos
con goyo.
Chemecando en ixos intes
baxo brempas falsas .

Estreitando dos matieras.
Dos abisos .
Dos tristuras .

DOS

Clamors de chade
esnabesan os nuestros cuerpos
dolens de seteguera,
e farchan en o leito
de as corriens nuebas.
Ambiestas de pasión sin medrana.

Besos furons con o fagüeño
que imple de simién
os melicos chupitos.
Si debuxásenos as trazas
amatas en un mirallo,
trayérbanos allora á iste mundo,
as tardadas entre leiteras
rusiens de mans.

POLVO PARA MORDER, POR JORGE BOCCANERA

En medio de la campaña se agradece un poema, como éste del poeta argentino Jorge Boccanera.

Polvo para morder

A veces la palabra
como una copa rota donde morder el polvo
y otras veces un agua
de alumbrar.

Asomada a los cielos, la palabra,
es un tambor de polvo deshecho al primer golpe.
remando en el infierno, la palabra,
es un agua posible sobre un manto de cólera.

Entonces, la palabra,
¿polvo, para morder en la oscuridad?
¿Agua, para alumbrar este cuerpo callado?

LOS PORTADORES DE SUEÑOS I

Hace unos días, una persona con la que últimamente he vivido días bastante intensos, me regalaba por correo electrónico este IMPRESIONANTE poema de la nicaragüense Gioconda Belli. Ya lo conocía, pero leerlo en ese instante me emocionó especialmente.

En todas las profecías
está escrita la destrucción del mundo.
Todas las profecías cuentan
que el hombre creará su propia destrucción.
Pero los siglos y la vida
que siempre se renueva
engendraron también una generación
de amadores y soñadores,
hombres y mujeres que no soñaron
con la destrucción del mundo,
sino con la construcción del mundo
de las mariposas y los ruiseñores.
Desde pequeños venían marcados por el amor.
Detrás de su apariencia cotidiana
Guardaban la ternura y el sol de medianoche.
Las madres los encontraban llorando
por un pájaro muerto
y más tarde también los encontraron a muchos
muertos como pájaros.
Estos seres cohabitaron con mujeres traslúcidas
y las dejaron preñadas de miel y de hijos verdecidos
por un invierno de caricias.

Así fue como proliferaron en el mundo los portadores sueños,
atacados ferozmente por los portadores
de profecías habladoras de catástrofes.
los llamaron ilusos, románticos, pensadores de utopías
dijeron que sus palabras eran viejas
y, en efecto, lo eran porque la memoria del paraíso es antigua
en el corazón del hombre.
Los acumuladores de riquezas les temían
lanzaban sus ejércitos contra ellos,
pero los portadores de sueños todas las noches
hacían el amor
y seguía brotando su semilla del vientre de ellas
que no sólo portaban sueños sino que los
multiplicaban
y los hacían correr y hablar.
De esta forma el mundo engendró de nuevo su vida
como también había engendrado
a los que inventaron la manera
de apagar el sol.
Los portadores de sueños sobrevivieron a los climas gélidos
pero en los climas cálidos casi parecían brotar por
generación espontánea.
Quizá las palmeras, los cielos azules, las lluvias torrenciales
tuvieron algo que ver con esto.
La verdad es que como laboriosas hormiguitas
estos especímenes no dejaban de soñar y de construir
hermosos mundos,
mundos de hermanos, de hombres y mujeres que se
llamaban compañeros,
que se enseñaban unos a otros a leer, se consolaban
en las muertes,
se curaban y cuidaban entre ellos, se querían, se ayudaban
en el arte de querer y en la defensa de la felicidad
.

LOS PORTADORES DE SUEÑOS II

Eran felices en su mundo de azúcar y de viento
de todas partes venían a impregnarse de su aliento
de sus claras miradas
hacia todas partes salían los que habían conocido
portando sueños
soñando con profecías nuevas
que hablaban de tiempos de mariposas y ruiseñores
y de que el mundo no tendría que terminar en la hecatombe.
Por el contrario, los científicos diseñarían
puentes, jardines, juguetes sorprendentes
para hacer más gozosa la felicidad del hombre.
Son peligrosos
imprimían las grandes rotativas
Son peligrosos
decían los presidentes en sus discursos
Son peligrosos
murmuraban los artífices de la guerra.
Hay que destruirlos
imprimían las grandes rotativas
Hay que destruirlos
decían los presidentes en sus discursos
Hay que destruirlos
murmuraban los artífices de la guerra.
Los portadores de sueños conocían su poder
por eso no se extrañaban
también sabían que la vida los había engendrado
para protegerse de la muerte que anuncian las profecías
y por eso defendían su vida aún con la muerte.

Por eso cultivaban jardines de sueños
y los exportaban con grandes lazos de colores.
Los profetas de la oscuridad se pasaban noches
y días enteros
vigilando los pasajes y los caminos
buscando estos peligrosos cargamentos
que nunca lograban atrapar
porque el que no tiene ojos para soñar
no ve los sueños ni de día, ni de noche.
Y en el mundo se ha desatado un gran tráfico de sueños
que no pueden detener los traficantes de la muerte;
por doquier hay paquetes con grandes lazos
que sólo esta nueva raza de hombres puede ver
la semilla de estos sueños no se puede detectar
porque va envuelta en rojos corazones
en amplios vestidos de maternidad
donde piesecitos soñadores alborotan los vientres
que los albergan.
Dicen que la tierra después de parirlos
desencadenó un cielo de arcoiris
y sopló de fecundidad las raíces de los árboles.
Nosotros sólo sabemos que los hemos visto
sabemos que la vida los engendró
para protegerse de la muerte que anuncian las profecías
.

ROSAS VARADAS, POR MARTA NAVARRO

Este rincón del bardo interrumpe su recorrido por la poesía de otras latitudes, para recoger un poema de una autora aragonesa, Marta Navarro, que hace muy poco tiempo ha obtenido con su poemario La victoria del heno, el premio de Poesía Victoria Kent, de la Asociación de Mujeres Progresistas Victoria Kent. Felicitamos una vez más a Marta, amiga bloggera coautora de entrenomadas, uno de mis preferidos y cuya lectura diaria se ha convertido ya en imprescindible.

De La victoria del heno, voy a extraer el poema Rosas varadas.

Empieza la jornada

el frío y los desiertos de cristal

salen a nuestro encuentro.

Somos un jardín de rosas ilegales,

rosas cubiertas

de cicatrices y fronteras

que comen piedras

y vomitan nubes.

Somos los ojos de la niebla,

la sed del agua muda,

la eterna victoria del heno.

Y resistimos como Iskra,

a los duros inviernos,

a las calles minadas de olvido.

Iskra rastrea,

ladra, se deja acariciar

y, como nosotras, espera

con los ojos abiertos

y las orejas aladas,

días cálidos, sin perreras

ni aduanas, sin fronteras.

Ya de regreso a casa

aullamos junto a Iskra

a la luna rota.

Pero los desiertos de cristal

no saben de plegarias,

no saben de aullidos.

Y empieza la jornada.

FRÍO, POR MATEJA MATEVSKI

Traemos a este rincón del bardo al poeta macedonio Mateja Matevski. Desde sus comienzos en la poesía, su obra se consideró por la crítica internacional como el hito con el cual la poesía macedonia se conectaba con los movimientos culturales contemporáneos en Europa. Entre sus publicaciones: Lluvia, 1956; Equinoccio, 1963; Romance de la fiesta, 1967; Crepúsculo, 1969; Perúnica, 1976; Círculo, 1977; Tilo, 1981; Voz, 1984 (antología); Nacimiento de la Tragedia, 1985.
Frío

Sobre mi frente yacen
las sombras de la noche
junto a la piedra fría
mi día comienza

Mi sueño se multiplica
en noches insomnes
mi día se desmorona
en el aro bordado del sol

La tierra me sostiene
la nube me conduce
y la piedra se libera
de mi alma sorda

En vano tú invocas
en vano tú buscas
las palomas azules
de largos años

Febrero descansa frío en tu pecho
helado como una fuente
aúlla como un perro.

Traducción de Edwald Osers y Jimena Londoño.

PEQUEÑA LETANÍA EN VOZ BAJA, POR HERIB CAMPOS

Herib Campos se puede considerar como uno de los principales poetas paraguayos del siglo XX. Su obra está marcada por la persecución política y por el destierro que sufrió desde 1931, al mismo tiempo que por un hondo sentimiento nacional paraguayo. Vaya aquí este hermoso poema como muestra de su obra.

Pequeña letanía en voz baja

Elegiré una Piedra.
Y un Arbol.
Y una Nube.
Y gritaré tu nombre
hasta que el aire ciego que te lleva
me escuche.
(En voz baja.)

Golpearé la pequena ventana del rocío;
extenderé un cordaje de cáñamo y resinas;
levantaré tu lino marinero
hasta el Viento Primero de tu Signo,
para que el Mar te nombre.
(En voz baja.)

Te lloran: cuatro pájaros;
un agobio de niños y de títeres;
los jazmines nocturnos de un patio paraguayo.
Y una guitarra coplera.
(En voz baja.)

Te llaman:
todo lo que es humilde bajo el cielo;
la inocencia de un pedazo de pan;
el puñado de sal que se derrama
sobre el mantel de un pobre;
la mirada sumisa de un caballo,
y un perro abandonado.
Y una carta.
(En voz baja.)

Yo también te he llamado,
en mi noche de altura y de azahares.
(En voz baja.)

Sólo tu soledad de ahora y siempre
te llamará, en la noche y en el día.
En voz alta.

DESNUDO Y PARA SIEMPRE, DE CARILDA OLIVER

Un poema de Carilda Oliver, una de las poetas fundamentales en la poesía cubana del siglo XX.

DESNUDO Y PARA SIEMPRE
(Carilda Oliver, Cuba)

Errática,
sin vino,
profesional del fósforo,
cuando tú
haciendo un remolino de ilusiones,
con ese estruendo del laurel,
desnudo y para siempre entraste bajo el agua.

Un poco demasiada,
como mirándome los pies,
cuando tú,
domingo rápido,
parada del vidrio,
hincaste el baño con tu gesto de animal profundo.

El agua,
ay,
quedó colgando entre mis ojos y tu carne
como una telaraña, desnudándote más.
Entendida por el demonio,
bárbara,
tuve un acceso de locura,
un punto apenas de explosión atómica,
un apogeo del clavel preciso
y creí.

(Creer es desear tu sexo y darle de comer a una paloma)

Se fue cayendo
la mañana.
El vicio de la estrella
saliendo así de entre tus párpados
era la luz
que yo he llamdo lágrimas;
relámpago que empieza aquí y después de verle
no morimos.
(Vete,
dolor que lo menciona:
al innombrable se le pone tumba,
en paz quedamos
y luego va una por el mundo como quien nunca tuvo
cosas inmortales).
Seguir leyendo

LA POESÍA DE LA DESESPERACIÓN

20070313-nadia.jpg
Hoy traemos a este rincón del bardo un poema de una mujer que ya no está con nosotr@s. Nadia Anjoman era una de esas mujeres afganas que nunca se han conformado con el papel que su sociedad ha planificado para ellas. Estudió periodismo en la Universidad de Herat, y comenzó a escribir poesía, llegando a publicar en 2005 un libro de título Gul-e-dodi (La flor grana). Al parecer durante el dominio talibán leyó secretamente a Shakespeare o Dostoievsky, lo que en esa época se castigaba con la horca. Unos meses después de publicar su libro murió por las heridas que le causó su marido. Vaya este poema suyo como reconocimiento a todas aquellas personas que se atreven a levantar su voz contra la represión, el fanatismo y el autoritarismo.

Nadia Anjoman, traducción de Andrés Alfaro

No tengo ganas de abrir la boca
¿De qué debo cantar?
Yo, quien está odiado por la vida,
No hay diferencia de cantar o no cantar.

¿Por qué debo hablar de la dulzura?
Cuando siento yo tanta amargura.
Oh, el festín del opresor
Me tocó la boca.
No tengo ni un compañero en esta vida
¿Para quién puedo estar dulce?
No hay diferencia de hablar, reír,
Morir, ser.
Yo con mi soledad agotada
Con dolor y tristeza.
Nací para nada.
La boca se debe precintar.
Oh mi corazón, ya sabes que es la primavera
Y el momento para celebrar.
¿Qué debo hacer con un ala atrapado?
Que no me deja volar.
He estado callada por demasiado tiempo
Pero nunca me olvido la melodía,
Porque cada momento cuchicheo yo
Las canciones de mi corazón
Que me acuerdan del
Día que voy a romper la jaula.
Volar de esta soledad
Y cantar como un melancólico.
No soy un débil árbol de álamo
Que cualquier viento va a sacudir.
Soy una mujer afgana,
Así que sólo tiene sentido para gemir.

TARDES SUSPENDIDAS, POR UZEYIR LOKMAN ÇAICI

Un hermoso poema del turco Uzeyir Lokman, traducido por Mercedes Ortega y Guillermo Ortega. El autor reside en Francia, y se ha convertido en los últimos años en uno de los poetas turcos más leidos en Europa.

Tardes suspendidas

No hay ya más claridad
rozando la cabecera de mi lecho.
Esas tardes han envejecido en mis sueños.
Una o dos arrugas han surcado mis ojos
y hay un cambio en mis venas.
Bebo a sorbos
las tardes escondidas en mis sueños.
Las sombras bajan rodando a mis pupilas.
Aún espero por ti,
delante de una estatua.
Las tardes ondulan como el canto de un pájaro.
Mis esperanzas perdidas
caen en esa suspensión,
mis sentimientos te llevan en el corazón
y yo digo que esas tardes detenidas
no se oscurecerán jamás.

LA POESÍA DE ANTJIE KROG

Antjie Krog es una de las poetas surafricanas más leidas dentro y fuera de su país. Es también filosofa, periodista y escritora. Durante los años 80 fue una activa militante del movimiento Anti-Apartheid. Incluimos aquí dos de sus poemas, traducidos por Nicolás Suescún.

Canción de amor africana

ni la húmeda intimidad de tus párpados aromáticos como el hinojo
ni la violencia de tu cuerpo resistiéndose entre las sábanas
ni lo que viene hacia mí como tu vida
tendrá tanta menuda piedad de mí

como verte durmiendo
tal vez a veces te veo
por primera vez
tú con tu pecho de guayaba y uva

tus manos frías como cucharas
tus grandes penas altivas manchan de azul cada parte

nos soportaremos uno a otro
incluso si el sol abraza los techos
incluso si el estado cocina lugares comunes
llenaremos nuestros corazones de color
y nuestras trifulcas de pinzones

incluso si mis ojos ascienden hasta el horizonte
incluso si la luna viene con la espalda desnuda
incluso si las montañas forman una conspiración contra la noche
persistiremos cada cual
a veces te veo por primera vez.

Tierra

bajo órdenes de mis antepasados fuiste ocupada
si supiera un lenguaje podría escribir pues fuiste tierra mi tierra
Seguir leyendo

SIEMPRE EN EL POEMA, POR AMINA SAÏD

 De una de las poetisas más reconocidas en Tunez

siempre en el poema

yo escucharé el silencio
antes que la palabra
abrevaré en su propia boca

entonces nacen las cosas
las palabras el mundo

digo: siempre en el poema
escucharé el silencio antes que las palabras

y tú respondes: si existe un dios
es allí donde habita

yo descubro la exacta vertiente
de la sombra y de la luz
donde termina donde comienza

y el silencio palpita como el mar
en su vientre de sal
palpita como el ala de un pájaro
domesticando lentamente el cielo
como el viento la tierra la vida

y si existe un dios sí
es allí donde habita

ERES INFINITO, POR JURE POTOKAR

Poesía Eslovena, de uno de sus autores contemporáneos más importantes.

Jure Potokar
Eres infinito

Eres infinito en el vacío que llena
tu alma, mudo e incomprensible como un punto
en el horizonte. a veces, a causa de tu mirada
fija, tiemblan enjambres de estrellas y entonces
comprendes que estás parado en el borde donde confluyen
el cielo y la tierra. como en un mapa
medieval. Eres lo suficientemente pequeño para creer
en el orden cósmico y lo suficientemente grande para anhelar
el secreto de las estrellas que llamas soledad
.

CROATIAM ESSE DELENDAM, POR DRAGO STAMBUK

Es Drago Stambuk uno de los poetas croatas contemporáneos más conocidos fuera de sus fronteras.


CROATIAM ESSE DELENDAM

Más rara que un unicornio,
como un ángel
entre las estrellas apagadas.
De palmas unidas
en un gemido sin retorno.

Te asedió el silencio,
los pensamientos palidecen
en los márgenes, no escuchas
el movimiento del mar del fondo.

Todo tu ser
vuela alrededor de la estrella negra
y esparces tus intenciones
a los escudos fríos de ella.

El borde marcó la emboscada,
el modesto lecho y la tumba,
el ato de leños secos
y la unza de plomo líquido.

Del mar emerge
la cobra real
con un rubí en el hueso de su frente.
El éter, vacilando el vapor,
dispara oscuros y pequeños soles de amor.

A tu sed, patria,
nadie traería agua.
Mientras el filo de dos cantos,
oscurecido por el veneno,
se apaga en las entrañas de Hefestion.

 

Su obra poética se puede ver a través de los siguientes libros:
Seguir leyendo

NUESTRA ERA, POR MOHAMED SALEM «EBNU»

images2.jpg
Mohamed Salem «Ebnu» es probablemente el poeta vivo Saharaui

más conocido internacionalmente.


Nuestra era

Esta es la era
de la soledad y el silencio
los amantes son desconocidos
que vagan tomados de las manos
por aceras distintas
en las interminables calles
de ciudades perdidas.Los transeúntes cabizbajos
van tropezando con
la podredumbre del futuro
que anuncian los lumínicos
de rascacielos invisibles.

Los niños se arrastran
mudos y descalzos
cargando sus penas
en busca del presente.

Mientras
el mundo va nadando
en aguas turbias
de ríos hediondos
que desembocan en el umbral
del nuevo milenio.
En esta edad
de hambrunas y guerras
en esta era
en que a nadie
se le ocurre pedir
una palanca para mover el mundo

EL REVERSO DE LA LUZ, POR LAZLO KALNOKY

Lazlo Kalnoky es uno de los poetas y traductores húngaros más importantes del siglo XX.Su primer libro de poemas, Az árnyak kertje (El jardín de las sombras), fue publicado en 1939, y reveló su excepcional sentido de las formas poéticas. Desde 1957 hasta su muerte se dedicó primordialmente a su propia poesía, y vivió de la traducción de poetas clásicos y modernos. Entre los dramas que figuran en su inmensa obra de traductor, está la segunda parte del Fausto de Goethe. Premio Baumgarten en 1947, Premio József Attila en 1963 y en 1972, Premio Robert Graves en 1970. 12 libros de poemas y un libro póstumo.

El reverso de la luz

Jirones azulosos de viento cansado,
monotonía de ademanes rígidos.
Roído de polillas, un rostro naufraga
en los grises enjuagues del ocaso.

Un ruido casi imperceptible:
la caída de un ramo en la memoria.

Una terraza; hierbas amarillas
Crecen sobre la gran mesa de piedra.
Se cenó aquí una vez, quien lo creyera,
se partieron los panes quejumbrosos.

Sombras enjutas, magras, aquí pasan,
imágenes de muertos ha mucho se deslizan
ignorando las manos que se tienden.

Si al fin llegara una de ellas,
y en sus cabellos, estrellas fugaces
y en su mirada ejércitos murieran,
lo oscuro de su huella
sería el reverso de la luz que escapa
.

El poema pertenece al libro EL REVERSO DE LA LUZ, Cuatro Poetas Húngaros, editado por la Universidad Nacional de Colombia, Bogotá, Editorial Orpheusz, Budapest.

UN POEMA OCCITANO

359aoccitaniaxs.jpg
Como ya he dicho en alguna ocasión en este blog, soy un apasionado de la cultura occitana en sus diferentes manifestaciones musicales, literarias, etc. Hoy traigo al rincón del bardo un poema en occitano de Gilabèrt Suberròcas. Creo que para comprenderlo no es necesario traducirlo al castellano, en todo caso si hubiera alguien que no entendiera cualquier palabra, que ponga un comentario y se la traduzco. El occitano actualmente es hablado por alrededor de seis millones de personas en el sur de Francia, en algunos valles de la frontera con Italia y en Era Val d´Arán.

QUÒRA BUHA LO VENT

quòra buha lo vent
cau assajar de víver
e un aute vent s’es levat
que los topins de flors estón descanilhats
las fòrmas [1] reconeishudas d’ara-avant son
provassosas de silenci dens
lo matin fred
solet se bolega un òme
eth tanben descanilhat
qu’assaja de se tornar quilhar
sas camas estón enrasigadas dens lo limon
sufís de s’esforçar

que vei sens lor espiar sos braç que s’alongan
s’alongan s’alongan
hòu vaquí lo carelh costumèr que partís
e que’n prohèiti per díser :

– que soi Gilabèrt lo ton frair
non te brembas pas de jo ?.

Seguir leyendo

EL COCHE ARRASTRA UNA VENA ROJA, POR EINAR BRAGUI

Einar Bragui es uno de los poetas islandeses más importantes del siglo XX. Forma parte de los denominados poetas atómicos islandeses. Este nombre es utilizado como homenaje a la publicación en 1948 de la novela Estación atómica de H. Laxness.

El coche arrastra una vena roja 1.957

sobre la calzada negra de la lluvia:

ovillo reluciente

que persigue la noche

siempre en círculos

en su desesperada búsqueda

de luz.

Sobre un rombo pulido

tras el vaho del cristal

se vuelven humo blanco

sonrisas, manos, labios impacientes

botellas, moscas brillantes

que vuelan silenciosas.

Un barrendero misterioso

sigue sus huellas, recoge

de la fría calzada

pájaros frioleros

peces vivos recién pescados

con su herida de anzuelo abierta.

LA POESÍA MAPUCHE DE GRACIELA HUINAO

250px-flag_of_the_mapuchessvg.png
Las voces de pueblos como el mapuche tan apenas llegan a Europa. En muchas ocasiones incluso se ven en dificultades para hacerse oir en su propio país, Chile. Graciela Huinao es una de sus poetisas más reconocidas desde finales de los años 80, en que empieza a publicar regularmente. En esta sección, el rincón del bardo, vamos a tratar de incidir en los próximos post en poetas de lenguas minoritarias y muy poco conocidos por estos lares.Incluimos aquí uno de sus poemas más conocidos y su traducción al castellano.
La bandera que acompaña esta entrada es la del pueblo mapuche

LA VIDA Y LA MUERTE SE HERMANAN

Al mirar atrás
puedo ver el camino
y las huellas que voy dejando.
A su orilla árboles milenarios se alzan
con algún cruce de amargas plantas.
Pero es equilibrada su sombra
desde la huerta de mi casa.
Allí aprendí a preparar la tierra
la cantidad de semilla en cada melga
para no tener dificultad en aporcarla.
Es tu vida
– me dijo- una vez mi padre
colocándome un puñado de tierra en la mano.
La vi tan negra, la sentí tan áspera.
Mi pequeña palma tembló.
Sin miedo – me dijo-
para que no te pesen los años.
La mano de mi padre envolvió la mía
y los pequeños habitantes
dejaron de moverse dentro de mi palma
El miedo me atravesó como punta de lanza.
Un segundo bastó
y sobraron todas las palabras.
Para mostrarme el terror
a la muerte que todos llevamos.
De enseñanza simple era mi padre
con su naturaleza sabia.
Al hermanar la vida y la muerte
en el centro de mi mano
y no temer cuando emprenda el camino
hacía la tierra de mis antepasados.
Abrimos nuestros dedos
y de un soplo retornó la vida
al pequeño universo de mi palma

LAMNGENWENNGEI CHI MONGEN KA CHI LA

Wiñokintulu iñche
pepi pen chi rüpu
ka pen ñi pünon ñi elnien.
Ñi inaltu meu kuifike aliwen witrapürai
kiñeke küruz fure anümka meu.
Seguir leyendo

EL ARTE DE FRANCHO NAGORE

fnagore.jpg

Ayer por la tarde estuve en el acto de inauguración de la exposición de la obra pictórica de Francho Nagore en el C.C.Almozara. Acto emocionante en el que hemos podido descubrir una faceta para la mayoría desconocida, del fundador del Consello d´a Fabla. Al acto asistieron Concha Nasarre, Concejal de Educación, Chulia Ara, Gerente del Patronato de Bibliotecas, Luis Pastor, Presidente de la Junta Muncipal de La Almozara, representantes del Rolde de Estudios Aragoneses, de Chuntos por L´Aragonés, del Liballo de Fablans, de Nogará y sobre todo muchos amigos de Francho. Para aprovechar un poco más el post, no desperdiciamos la oportunidad de reproducir un poema suyo.

Canta d´agüerro, del libro Sospiros de l´aire

L’otoño ye astí:
tras l’alegre mallo,
unde lo sol pega.
Unde se’n va jopando
lo sol triste y royo
con añoranzas berdas.
Ya gora tót ye escuridá:
ye una tardi sombría d’agüerro.
Tót ye triste. Lo triste ye triste,
lo bardo, ye bardo. Y l’aigua
fa triste lo que encara no yera
.

SUENIOS ENTRE LINZUELOS, POR VALENTÍN CAZAÑA

Rescato un poema en aragónes que escribi en el 2001.

Clamors de chade
esnabesan os nuestros cuerpos
dolens de seteguera,
e farchan en o leito
de as corriens nuebas
ambiestas de pasión sin medrana.

Besos furons con o fagüeño
que imple de simién
os melicos chupitos.
Si debuxásenos as trazas
amatas en un mirallo,
trayérbanos allora á iste mundo,
as tardadas entre leiteras
rusiens de mans
.

AUTOPSICOBIOGRAFÍA, POR FERNANDO PESSOA

pessoa.jpg
El poeta es un fingidor,
Finge tan completamente
Que llega a fingir que es dolor
El dolor que de veras siente.

Y los que leen lo que escribe,
En el dolor leído sienten bien,
No los dos que él tuvo
Sino sólo el que ellos no tienen.

Y así en sus rieles, rueda
Entreteniendo la razón,
Ese tren de cuerda
Que se llama corazón
.

ERES TODA DE ESPUMAS, DE PABLO NERUDA

hace-102-anios-pablo-neruda.jpg
Qué mejor para reanudar la actividad laboral que hacerlo con algo de poesía, y además si se trata de Pablo Neruda…

ERES TODA DE ESPUMAS…

Eres toda de espumas delgadas y ligeras
y te cruzan los besos y te riegan los días.
Mi gesto, mi ansiedad cuelgan de tu mirada.
Vaso de resonancias y de estrellas cautivas.
Estoy cansado, todas las hojas caen, mueren.
Caen, mueren los pájaros. Caen, mueren las vidas.

Cansado, estoy cansado. Ven, anhélame, víbrame.
Oh, mi pobre ilusión, mi guirnalda encendida!
El ansia cae, muere. Cae, muere el deseo.
Caen, mueren las llamas en la noche infinita.

Fogonazo de luces, paloma de gredas rubias,
líbrame de esta noche que acosa y aniquila.

Sumérgeme en tu nido de vértigo y caricia.
Anhélame, retiéneme.
La embriaguez a ]a sombra florida de tus ojos,
las caídas, los triunfos, los saltos de la fiebre.
Ámame, ámame, ámame.
De pie te grito! Quiéreme.
Rompo mi voz gritándote y hago horarios de fuego
en la noche preñada de estrellas y lebreles.
Rompo mi voz y grito. Mujer, ámame, anhélame.
Mi voz arde en los vientos, mi voz que cae y muere.

Cansado. Estoy cansado. Huye. Aléjate. Extínguete.
No aprisiones mi estéril cabeza entre tus manos.
Que me crucen la frente los látigos del hielo.
Que mi inquietud se azote Con los vientos atlánticos.
Huye, Aléjate. Extínguete. Mi alma debe estar sola.
Debe crucificarse, hacerse astillas, rodar,
verterse, contaminarse sola,
abierta a la marea de los llantos,
ardiendo en el ciclón de las furias,
erguida entre los cerros y los pájaros,
aniquilarse, exterminarse sola,
abandonada y única como un faro de espanto
.

PREGUNTA, DE MOHAMMED BENNIS

Un poema a media mañana nunca biene mal. En este caso uno de Mohammed Bennis, un poeta marroquí reconocido internacionalmente.

PREGUNTA

Bienvenida
la caída del ojo
a su refugio
Bienvenida
la sangre
que se inflama en anárquica carrera
Una lengua
para la aridez del alma
y otra
para el rapto por la savia
del delirio
Oh, tú
que habitas en
el hueco de mi pecho
quién
acompañará a mis muertos esta noche
antes del alba
hacia
las colinas de la luz
y quién
de algo
me hará entrega
ante una travesía que fulgente se anuncia

LA MAÑANA, DE SVETLANA MAKAROVIC

 Un poema de Svetlana Makarovic, una de las autoras más reconocidas de Eslovenia. La traducción es de Mariluz Suárez.

 LA MAÑANA

Caminas cuidadosamente entre los trozos del sueño.
Las estrellas, grandes, pálidas y dulces,
Están desvaneciéndose en el húmedo amanecer.

Tímidamente sorbes plata
De la copa de la madrugada.

Las caras grises de la noche gris
ciegas fijan su mirada en lo gris.
Muriéndose,
Apoyadas en tus hombros.

Anda con cuidado.
A algo amargo huelen
las hierbas de la mañana

NADIE ESTÁ SOLO, DE JOSÉ AGUSTÍN GOYTISOLO

 goy.jpg

Desgraciadamente, todavía hoy este poema de José Agustín Goytisolo sigue teniendo plena vigencia.

NADIE ESTÁ SOLO

En este mismo instante
hay un hombre que sufre,
un hombre torturado
tan sólo por amar
la libertad. Ignoro
dónde vive, qué lengua
habla, de qué color
tiene la piel, cómo
se llama, pero
en este mismo instante,
cuando tus ojos leen
mi pequeño poema,
ese hombre existe, grita,
se puede oír su llanto
de animal acosado,
mientras muerde sus labios
para no denunciar
a los amigos. ¿Oyes?
Un hombre solo
grita maniatado, existe
en algún sitio. ¿He dicho solo?
¿No sientes, como yo,
el dolor de su cuerpo
repetido en el tuyo?
¿No te mana la sangre
bajo los golpes ciegos?
Nadie está solo. Ahora,
en este mismo instante,
también a ti y a mí
nos tienen maniatados.

(José Agustín Goytisolo. Algo sucede.)

COMO SI NUNCA HUBIERA SIDO MÍA, DE CLAUDIO RODRÍGUEZ

A esta hora de la mañana se agradece un poema.

CLAUDIO RODRÍGUEZ

COMO SI NUNCA HUBIERA SIDO MÍA

Como si nunca hubiera sido mía,
dad al aire mi voz y que en el aire
sea de todos y la sepan todos
igual que una mañana o una tarde.
Ni a la rama tan sólo abril acude
ni el agua espera sólo el estiaje.
¿Quién podrá decir que es suyo el viento,
suya la luz, el canto de las aves
en el que esplende la estación, más cuando
llega la noche y en los chopos arde
tan peligrosamente retenida?
¡Que todo acabe aquí, que todo acabe
de una vez para siempre! La flor vive
tan bella porque vive poco tiempo
y, sin embargo, cómo se da, unánime,
dejando de ser flor y convirtiéndose
en ímpetu de entrega. Invierno, aunque
no esté detrás la primavera, saca
fuera de mí lo mío y hazme parte,
inútil polen que se pierde en tierra
pero ha sido de todos y de nadie.
Sobre el abierto páramo, el relente
es pinar en el pino, aire en el aire,
relente sólo para mí sequía.
Sobre la voz que va excavando un cauce
qué sacrilegio éste del cuerpo, éste
de no poder ser hostia para darse
.

NIEVE, POR NICOLÁS GUILLÉN

En un día como hoy, parece muy apropiado este poema del gran Nicolás Guillén.
NIEVE

Como la nieve cae aquí,
nieva también dentro de mí.
(Verlaine con nieve, ¿no es así?)
De ti me acuerdo —ya sin ti.

¿A qué llorar, me digo yo,
por quien no llora ni lloró?
Si estuve escrito, me borró,
si ardí un instante, me apagó.

Caiga la nieve, está muy bien.
Mas no por eso va Guillén
a entristecerse si no hay quien
del mismo mal muera también.

Literatura, en realidad,
nimia de toda nimiedad.
¿Que está nevando en la ciudad?
Al fin y al cabo es la verdad
.

POESÍA CONTRA LA GUERRA

bush-crimes.gif

En este cuarto aniversario del comienzo de la guerra de Irak, dedicamos en el rincón del bardo un espacio para la poesía iraquí en la persona de Adnan Al-Sayegh, uno de sus principales representantes. Fue combatiente en la primera guerra del golfo, y posteriormente fue condenado a muerte por el régimen de Saddam en 1993. Es autor de la obra Himno de Uruk. Actualmente vive en Londres.

Agujero

Un tiro pasajero
atravesó su dormir
y se desangró,
viciosa
– sobre la almohada –
la sangre de sus sueños derrotados
.

Estupidez

En cada caída de un dictador
del trono de la historia,
que está esculpido con nuestras lágrimas,
se me inflaman las manos de tanto aplaudir
pero nada mas de volver a casa
y enciendo la televisión,
que se escupe otro dictador
de las bocas de la gente
que aplauden y silban…
Me rio
de mi estupidez
se me llenan los ojos de lágrimas
.

Fin

Abro la nevera de mi tristeza
saco la botella
y la bebo totalmente.
brindo por mis amigos,
exiliados, a través de los túneles,
sin patria,
sin tabaco, ni pasaportes.

Brindo copa tras copa,
o cadáver tras otro.
Y cuando caigo de la ebriedad
en la acera,
me llevarán _ en sus tumbas _
hasta la casa
.

Traducciones: Abdulhadi Sadoun

RETROSPECTIVA EXISTENTE, DE MIGUEL LABORDETA

Desde hace muchos años la poesía de Miguel Labordeta figura entre mis lecturas poéticas habituales.

Retrospectiva existente

Me registro los bolsillos desiertos
para saber dónde fueron aquellos sueños.
Invado las estancias vacías
para recoger mis palabras tan lejanamente idas.
Saqueo aparadores antiguos,
viejos zapatos, amarillentas fotografías tiernas,
estilográficas desusadas y textos desgajados del Bachillerato,
pero nadie me dice quién fui yo.

Aquellas canciones que tanto amaba
no me explican dónde fueron mis minutos,
y aunque torturo los espejos
con peinados de quince años,
con miradas podridas de cinco años
o quizá de muerto,
nadie, nadie me dice dónde estuvo mi voz
ni de qué sirvió mi fuerte sombra mía
esculpida en presurosos desayunos,
en jolgorios de aulas y pelotas de trapo,
mientras los otoños sedimentaban
de pálidas sangres
las bodegas del Ebro.

¿En qué escondidos armarios
guardan los subterráneos ángeles
nuestros restos de nieve nocturna atormentada?
¿Por qué vertientes terribles se despeñan
los corazones de los viejos relojes parados?
¿Dónde encontraremos todo aquello
que éramos en las tardes de los sábados,
cuando el violento secreto de la Vida
era tan sólo
una dulce campana enamorada?
Pues yo registro los bolsillos desiertos
y no encuentro ni un solo minuto mío,
ni una sola mirada en los espejos
que me diga quién fui yo
.

Miguel Labordeta

SIN QUERER, DE ÁNGEL CRESPO

Un poema de Ángel Crespo, el gran poeta de Ciudad Real, siempre comprometido políticamente con la realidad que le tocó vivir. Para conocer más sobre su biografía.

SIN QUERER

Sin querer,
sin encontrar una niebla de olvido
que me haga extraviarme en mi presente,
que no recuerdo
porque la luz es excesiva;

sin querer,
sin desaprender esa música
lejana -y conseguir,
en el día brumoso,
escuchar al silencio lleno de alas.

Sin querer
-nunca queréis, no quiero-,
vamos impulsados por remos
de una leña que no consume
el fuego que nos arde.

Sin querer,
caminamos hacia un final
que nos aguarda indiferente
-no es cazador- con su sima de olas
sin sal y sin espumas.

Sin querer,
ignoro si es posible
recobrar el aquí que ignoro,
o, ciego y en silencio,
sumergirme en el río
que me niegue a vosotros,
sin querer
.
.

COMO EL PRIMER CIGARRO, POR LUIS GARCÍA MONTERO

Uno de mis poetas contemporáneos favoritos es Luis García Montero.

COMO EL PRIMER CIGARRO…

Como el primer cigarro,
los primeros abrazos. Tú tenías
una pequeña estrella de papel
brillante sobre el pómulo
y ocupabas la escena marginal
donde las fiestas juntan la soledad, la música
o el deseo apacible de un regreso en común,
casi siempre más tarde.

Y no la oscuridad, sino esas horas
que convierten las calles en decorados públicos
para el privado amor,
atravesaron juntas
nuestras posibles sombras fugitivas,
con los cuellos alzados y fumando.
Siluetas con voz,
sombras en las que fue tomando cuerpo
esa historia que hoy somos de verdad,
una vez apostada la paz del corazón.

Aunque también se hicieron
los muebles a nosotros.
Frente a aquella ventana -que no cerraba bien-
en una habitación parecida a la nuestra,
con libros y con cuerpos parecidos,
estuvimos amándonos
bajo el primer bostezo de la ciudad, su aviso,
su arrogante protesta. Yo tenía
una pequeña estrella de papel
brillando sobre el labio
.

EL RINCÓN DEL BARDO

Con este post comienza una sección, el rincón del bardo, en la que reproduciré producción literaria propia y de mis autores favoritos. Comienzo con un poema propio del año 2003, incluido en un volumen de la editorial Egido.

Si escucho tu voz de hielo,

abadonada en días depresivos

recaigo en un infinito pozo de añoranza acantilada.

Si escucho tu voz de brasa azuzada

me desbordo en erupción de volcán lacerado.

Silabas mojadas

precipitan en tu desnudez,

dibujada en un boceto de excitación.

[leve ruido de primavera

abierta a los sentidos]